Investigación
«El futuro de la humanidad y del planeta depende de nuestra capacidad para adoptar medidas responsables que garanticen el uso sostenible de este recurso vital. Aplicando prácticas de ahorro de agua en nuestros hogares, industrias y empresas, podemos contribuir a la preservación del medioambiente y dejar un legado de sostenibilidad a las futuras generaciones.«
Por: Fernando Helí Romero Ordóñez
El agua, esencial para la vida, es un recurso finito y valioso cuya gestión responsable es crucial para garantizar el futuro de las actuales y las futuras generaciones. Es demasiado importante reducir su consumo, entender y usar formas prácticas para su ahorro en el campo, los hogares y las industrias.
El agua sustenta ecosistemas, culturas, economías y comunidades en todo el mundo. Sin embargo, el mal uso, su contaminación y la creciente demanda junto con la acelerada urbanización ejerce una presión insostenible sobre los recursos hídricos disponibles. La escasez de agua no es solo una amenaza para los frágiles ecosistemas, sino que también afecta directamente la seguridad alimentaria, la salud pública y la economía.
Según el Informe Mundial de las Naciones Unidas sobre el Desarrollo de los Recursos Hídricos de 2019, más de 2.000 millones de personas se enfrentan a la escasez de agua en diversos grados. Adoptar prácticas de uso sostenible es crucial tanto para garantizar la disponibilidad para las generaciones futuras como para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible ONU (2020).
Investigadores de la Academia China de Ciencias descubrieron que en 2050 la escasez de agua podría devastar hasta el 84% de las zonas agrícolas de todo el mundo. Los científicos analizaron los niveles de agua de lluvia y de riego en cada zona de cultivo, y a partir de ahí crearon un índice para medir y predecir la escasez de agua en las distintas superficies relacionadas con la agricultura, como el suelo, los ríos y las zonas de regadío.
Según los investigadores chinos, tanto los cambios en los patrones de temperatura y precipitaciones como las prácticas agrícolas intensivas tienden a provocar una escasez de agua, por lo que la producción agrícola se enfrentaría a retos sin precedentes por la escasez de agua en la agricultura (Xingcai etal., 2022).
Por medio de estudios sobre la calidad de aguas superficiales y subterráneas, y a través de trabajos de campo y laboratorio en el curso del Pasivo Ambiental, en el Departamento de Geociencias de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) mostramos que el agua no solo contribuye a preservar el medioambiente, sino que también genera beneficios socioeconómicos. Las inversiones en infraestructuras hídricas eficientes pueden ayudar a crear empleos y reducir costos en hogares e industrias.
La concientización sobre la relación agua-vida es una cuestión de amor, solidaridad y educación. Este trabajo se inicia con los niños, que hoy están encerrados en apartamentos y viendo el mundo a través de pantallas; a menudo nuestros pequeños ven la naturaleza como algo ficticio, como si fuera un dibujo animado, y el mundo natural se aleja cada vez más de ellos.
Por eso es muy importante que la propuesta pedagógica en los jardines infantiles y en los primeros cursos de escuelas primarias acerque a los niños a actividades que lleven a la experiencia y reflexión sobre nuestras acciones individuales que se reflejan directamente en el colectivo y vuelven a nosotros como un bumerán.
Es muy importante que las industrias o fábricas
eduquen a los empleados sobre la importancia
de ahorrar agua.
Somos acción y el resultado de esas acciones. Todos somos responsables del bienestar individual y colectivo de hoy y de mañana. Y es precisamente en la infancia cuando los seres humanos somos más propensos a establecer vínculos emocionales de responsabilidad y afecto que durarán toda la vida. Todos los profesores, todas las escuelas, todos los colegios y todos los adultos deberíamos abrazar la idea de sembrar recuerdos emocionales de cuidado y afecto por el mundo natural que nos rodea. Nunca debemos olvidar que el mundo necesita agua.
El agua en la economía
Diferentes sectores de la economía –como el abastecimiento doméstico, las industrias o empresas y la agricultura– se ven afectados por la escasez de agua. Algunas acciones y correctivos pueden ayudar a ahorrar y reducir su consumo.
En los hogares el primer paso para ahorrar es la concientización, por eso son importantes las charlas entre padres e hijos sobre la necesidad de reducir el tiempo en la ducha, lavar los platos sobre un platón, no abrir toda la llave de lavamanos y lavavajillas, no arrojar aceites de cocina en el lavaplatos, no lavar antejardines con manguera y sí barrerlos, entre otros.
El segundo paso es la reparación de escapes y fugas, ya que las pequeñas fugas pueden desperdiciar grandes cantidades. Revisar con regularidad grifos, duchas y sistemas de fontanería. Los grifos y duchas deben ser eficientes, de ahí que ayuda instalar grifos y duchas de bajo caudal, que reducen el consumo de agua sin comprometer el confort. Sería ideal que cuando el adulto haga estos trabajos se acompañe de un niño y le explique cómo se hace y porqué es importante.
El tercer paso es el uso consciente; hay que cerrar el grifo mientras se cepillan los dientes, al enjabonarse las manos o al lavar los platos. Utilizar las lavadoras y lavavajillas solo con la carga completa. Un último paso es recoger el agua de lluvia para regar plantas y jardines.
En industrias y empresas el ahorro de agua se realiza evaluando los procesos, es decir adelantando un análisis de los procesos industriales para identificar las áreas en las que el agua se utiliza innecesariamente o se desperdicia. Igualmente reutilizar el agua implementando sistemas de tratamiento que permitan usarla en procesos que no requieran agua potable. Las industrias deben adoptar tecnologías eficientes y eficaces usando equipos y maquinarias modernas que reduzcan el consumo de agua, como los sistemas de refrigeración en seco.
Es muy importante que las industrias o fábricas eduquen a los empleados sobre la importancia de ahorrar agua y promover prácticas conscientes en el local de trabajo. En las industrias hay que controlar y medir, es decir instalar sistemas de control para hacer seguimiento del uso del agua e identificar los locales que se deben optimizar.
El ahorro de agua en la agricultura
Se inicia adoptando el riego por goteo, técnica que suministra agua directamente a las raíces de las plantas de forma controlada y precisa. Este método reduce significativamente las pérdidas por evaporación y escorrentía, maximizando la absorción por las plantas. La técnica del goteo ahorra agua al dirigirla específicamente donde se necesita. Se deben adoptar sensores de humedad del suelo y tecnologías de control en tiempo real que les permitan a los agricultores evaluar con precisión las necesidades de agua de las plantas, lo cual posibilita aplicar la cantidad correcta de agua evitando el exceso y el desperdicio.
En las industrias agrícolas, la rotación de cultivos y las prácticas agroecológicas como la siembra de cultivos complementarios y el uso de cultivos de cobertura pueden mejorar la estructura del suelo, aumentar su capacidad de retención de agua y reducir la necesidad de riego frecuente.
Cubrir el suelo con materiales orgánicos o plástico reflectante ayuda a reducir la evaporación del agua del suelo, manteniendo estables la humedad y la temperatura. Esto se traduce en una menor necesidad de riego y protege el suelo de la erosión. Reusar el agua, reciclar y tratar las aguas residuales agrícolas permite reutilizarla en procesos anteriores, con lo que no solo se ahorra, sino que también reduce la contaminación y mejora la calidad del suelo.
El futuro de la humanidad y del planeta depende de nuestra capacidad para adoptar medidas responsables que garanticen el uso sostenible de este recurso vital. Aplicando prácticas de ahorro de agua en nuestros hogares, industrias y empresas podemos contribuir a la preservación del medioambiente y dejar un legado de sostenibilidad a las futuras generaciones.
Independientemente de partidos políticos, razas, religiones, sexo, entre otros factores, Colombia necesita establecer una política educativa desde los jardines infantiles hasta las universidades que vea el agua como recurso finito para el bien de la humanidad. El cambio empieza por cada uno de nosotros y cada gota ahorrada cuenta para un futuro sostenible y próspero. No dejemos morir el agua.
Referencias
- Naciones Unidas. (2019). Informe sobre el desarrollo de los recursos hídricos en el mundo sin dejar a nadie atrás. Unesco.
- Grafton, R. Q. et al. (2018). La paradoja de la eficiencia del riego. Science, 361(6404): 748-750.
- Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). (2020). La escasez de agua en la agricultura.
- Scheepers, R. & Boakye-Ansah, A. (2019). Reevaluando la escasez de agua urbana en Ciudad del Cabo: Un diagnóstico interdisciplinario. Water Research, 157, 16-26.
- Xingcai, L., Wenfeng, L., Quiuhong, T., Bo, L. (2022). Global Agricultural Water Scarcity Assessment Incorporating Blue and Green Water Availability Under Future Climate Change. Earth’s Future 10(4): 1-16.
Publicado por Periódico Unal el 11 de abril de 2024.