NUESTRA HISTORIA
“Aunque para la época de la creación de ADEMINAS era dispendioso fundar una nueva asociación, había facilidades para ello, por cuanto existían factores positivos: el gran prestigio que siempre ha tenido la Facultad, entre sus egresados y la comunidad en general, las calidades profesionales excelsas de los convocantes, el ambiente favorable para el tipo de asociaciones reinantes en el momento, creado por el binomio SAI-CAMACOL al cual eran allegados los ingenieros Arango Álvarez y Santa María Álvarez, la tradición existente en la Facultad de la celebración de las fiestas del egresado en el mes de octubre, organizadas por los alumnos de quinto año de la Escuela y, finalmente, la necesidad de una asociación veedora del acontecer ingenieril y del mejoramiento del mismo, dentro de los ex alumnos la Escuela de Minas.”
Alberto Piedrahita Muñoz
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Se transcribe textualmente la primera acta de la reunión de la Junta Directiva redactada “in situ”, con excelente caligrafía por el inolvidable ex secretario de la Escuela de Minas Alonso Ramírez, que dicho sea de paso no era egresado de la Facultad pero una persona que puso todo su entusiasmo en el proceso de fundación de Ademinas.
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Como se dijo, el Acta se trascribió textualmente. Fue hecha en bella caligrafía como era la usanza. La misma se explica por sí sola.
La segunda reunión de Junta Directiva se hizo el 10 de enero de 1963 en la Decanatura de la Escuela, que para la época era un verdadero templo del saber ingenieril y ningún otro sitio podría ser más adecuado para las reuniones de una naciente asociación que agrupara los ingenieros egresados de la Facultad. Se fijó el 11 de abril de cada año, como día clásico, por ser la fecha de aniversario de la Facultad.
Peter Santa María Decano de la Escuela de Minas venía de ser Secretario de Hacienda del Departamento, en la Gobernación de Mario Aramburo y entre ambos habían liderado la fundación del Instituto Para el Desarrollo de Antioquia -IDEA-, con dineros provenientes de la venta del Ferrocarril de Antioquia. Para este logro se dieron larguísimos debates en pro y en contra, en la Asamblea Departamental y en los periódicos, cuando intervino la Ingeniería de Antioquia, para dar luz a tan trascendental hecho histórico para su desarrollo. Este es un verdadero hito en la historia de nuestro Departamento.
Juan Santa María A. venía de Inglaterra con especializaciones en Estructuras y en Puentes, era profesor de la Escuela en similares materias, perteneciente a descollante familia de la ingeniería, la industria y el comercio. Nadie más idóneo para el encargo que se le hacía, como Director Ejecutivo – Tesorero.
Quien escribe este artículo hizo la parte mecánica de llamadas telefónicas, gestiones en las entidades oficiales, citaciones a personalidades distinguidas etc. Etc. Todo se le facilitó porque solicitar algo a nombre de los cofundadores varias veces mencionados y en el de la Escuela de Minas, constituían factores determinantes para que ” se abrieran todas las puertas.”
ADEMINAS, con breves interrupciones, ha sido promotora de múltiples actividades ingenieriles en desarrollo de sus objetivos y de su norma estatutaria. Acción descollante tanto profesional como social ha sido el “llamado”, que año por año le hace a la promoción de egresados, que cumple 50 años. Este reencuentro espiritual y social ha servido para hacerle entrega a los ingenieros en su Bodas de Oro profesionales la ORDEN DEL CENTENARIO, presea creada por ADEMINAS para premiar las acciones destacadas cumplidas por los exalumnos en pro de la ingeniería, el desarrollo económico, social y de infraestructura de Colombia.
Muchas anécdotas pudiéramos escribir sobre estos encuentros de egresados, porque los integrantes de la ingeniería de Antioquia, pioneros de esta profesión, emocionados y con lágrimas de orgullo, afirman que esta “MEDALLA” constituye el legado más importante que el ingeniero que la recibe, dejará a su descendencia.
Las reuniones de ADEMINAS en sus comienzos se efectuaron con regularidad. Los integrantes del Consejo Directivo siempre mantuvieron su mejor disposición para colaborar en el logro de los propósitos. Esto ocurría en los años 63, 64, 65 y 66 del siglo pasado, durante la excelente Decanatura de Peter Santa María Álvarez, a quien la historia de la Facultad, la historia de Antioquia debe poner dentro de los ingenieros eximios en todos los tiempos, como hombre preocupado por el adelanto social, económico, profesional y técnico del departamento. Un hombre a la altura del sabio Ospina, fundador de la Facultad.
También ADEMINAS en su momento exaltará la memoria de los integrantes de sus Comité Directivos en todos sus tiempos, con especialidad, en los comienzos por haber sembrado las bases de la Asociación.